CALENTADOR A GAS

Un calentador de gas natural es un aparato que utiliza el gas natural como combustible para calentar el agua que se usa en el hogar. El gas natural es una fuente de energía limpia y económica que se distribuye por tuberías desde los yacimientos subterráneos. El calentador de gas natural tiene varias ventajas, como:

• No necesita bombonas ni depósitos de gas, lo que evita el transporte y el almacenamiento.
• No contamina el medio ambiente ni la salud, ya que el gas natural es tratado antes de su uso y se le añade un olor para detectar posibles fugas.
• Ofrece agua caliente de forma instantánea e ilimitada, sin depender de la electricidad ni del clima.
• Tiene un precio más bajo que otros sistemas de calentamiento, tanto en el aparato como en el consumo y el mantenimiento.

El funcionamiento de un calentador de gas natural es simple: al abrir un grifo, el gas se enciende y calienta el agua que circula por un serpentín dentro del calentador. El agua caliente sale por el grifo y el gas se apaga cuando se cierra. Los gases que se generan en la combustión se expulsan al exterior por una chimenea o un conducto.

Existen diferentes tipos de calentadores de gas natural, según su diseño y su tecnología. Los más comunes son:

• Los calentadores atmosféricos, que toman el aire del ambiente para la combustión y lo expulsan por una chimenea. Son los más antiguos y los más baratos, pero también los menos seguros y eficientes.
• Los calentadores estancos, que tienen una cámara cerrada donde se produce la combustión y un ventilador que extrae el aire del exterior y expulsa los gases. Son más seguros y eficientes que los atmosféricos, pero también más caros y requieren una instalación más compleja.
• Los calentadores termostáticos, que son una variante de los estancos que permiten regular la temperatura del agua con precisión. Son los más avanzados y cómodos, pero también los más costosos.